10 trámites imprescindibles tras la muerte de un familiar

Después de la pérdida de un ser querido, la burocracia puede añadir estrés adicional. En esta entrada, analizaremos los 10 trámites esenciales que deben completarse tras la muerte de un familiar, ofreciendo orientación y consejos prácticos para cada uno. Desde aspectos legales hasta tareas cotidianas, esta guía proporcionará recursos para abordar estos procesos con eficacia y sensibilidad.

¿Qué hacer tras la muerte de un familiar?

El fallecimiento de un familiar conlleva una serie de trámites que deben abordarse en un momento emocionalmente difícil. Si bien la organización del funeral es prioritaria, hay una serie de gestiones adicionales que requieren atención. Es crucial contar con servicios funerarios completos que se encarguen de estas diligencias, permitiendo a la familia centrarse en su proceso de duelo sin preocupaciones adicionales.

Lista de los 10 trámites imprescindibles tras la muerte de un familiar

1. Certificado de defunción

Después del fallecimiento, se requiere un certificado médico de defunción, expedido por un profesional de la salud. En hospitales, este proceso se maneja internamente, pero si ocurre en casa, se debe solicitar asistencia médica para certificar la defunción. El certificado debe presentarse en el Registro Civil en un plazo de 24 horas. En casos de muerte no natural, el proceso puede ser distinto, con la posibilidad de una autopsia y otros procedimientos judiciales.

2. Registrar fallecimiento en el Registro Civil

Es fundamental inscribir el fallecimiento en el Registro Civil en un plazo de 24 horas desde el deceso. Sin este registro, no se puede proceder con el sepelio o la cremación. Se necesitará el certificado de defunción, que incluya detalles como la fecha y el lugar del fallecimiento, el DNI del difunto, una copia del DNI del solicitante y el Libro de Familia para confirmar el parentesco. En casos de muerte judicial, se requerirá una orden judicial equivalente al certificado de defunción. Este trámite otorga la licencia para el entierro o la cremación, permitiendo así organizar el servicio fúnebre.

3. Informar a la Seguridad Social

Es esencial informar a la Seguridad Social sobre el fallecimiento en un plazo máximo de 30 días. Este trámite es crucial para acceder a las prestaciones públicas pertinentes, como la pensión de viudedad u orfandad. Para realizar este proceso, se debe llevar el certificado de defunción a cualquier centro de la Seguridad Social.

4. Notificar a la entidad bancaria

Después del fallecimiento de un titular bancario, es crucial informar a la entidad financiera correspondiente. Generalmente, las cuentas bancarias se bloquean hasta que los herederos demuestren su derecho sobre los fondos. Se requieren varios documentos, como el certificado de defunción, el testamento o declaración de herederos, entre otros. Es importante dejar algo de saldo en la cuenta para cubrir posibles pagos pendientes y estar al tanto de cualquier ingreso, como la devolución de la declaración de la renta.

5. Certificado de última voluntad

El certificado de últimas voluntades es esencial para conocer si el difunto dejó testamento y en qué notaría se encuentra registrado. Tras 15 días hábiles desde el fallecimiento, se puede solicitar completando el modelo 790, disponible en las gerencias territoriales del Ministerio de Justicia o en su sede electrónica. Se debe adjuntar el certificado literal de defunción emitido por el Registro Civil correspondiente.

Tramites tras la muerte de un familiar

6. Certificación de seguros

El siguiente paso tras el fallecimiento de un ser querido es obtener la certificación de seguros. Utilizando el modelo 790, se puede solicitar el certificado de contratos de seguros de cobertura de fallecimiento. Este documento es crucial para determinar si el difunto tenía algún contrato vigente con una compañía aseguradora. Con esta información, los familiares pueden conocer si el difunto contaba con algún seguro de vida o accidentes.

7. Testamento o declaración de herederos

Una vez obtenido el certificado de últimas voluntades del fallecido, se puede verificar si existía un testamento. Esto abre dos posibilidades:

Si se encuentra un testamento, los herederos deben dirigirse al notario correspondiente para aceptar la herencia o asumir las deudas pendientes.

En ausencia de testamento, los herederos deben acudir a un notario o al juez, según el grado de parentesco, para realizar una declaración de herederos. Esto permite proceder al reparto de la herencia, si la hay.

8. Aceptación o rechazo de la herencia

Cuando enfrentamos la pérdida de un ser querido, también debemos abordar decisiones legales y emocionales relacionadas con su herencia. Aceptar o rechazar una herencia implica ponderar responsabilidades financieras y personales. Aceptarla significa asumir activos y deudas, con beneficios o perjuicios económicos. Rechazarla puede evitar deudas, pero también supone renunciar a posibles beneficios. Es crucial evaluar las implicaciones con asesoramiento legal y financiero antes de decidir, ya que puede ser una elección emocionalmente cargada.

9. Trámites para obtener pensión

Una vez registrado el fallecimiento en la Seguridad Social, los familiares elegibles pueden solicitar pensiones como la de viudedad u orfandad. Es fundamental realizar esta gestión dentro de los tres meses posteriores al deceso para evitar perder parte del pago, ya que este solo se abonará retroactivamente hasta tres meses desde la solicitud. Aunque no hay un límite temporal estricto, es recomendable realizar este trámite cuanto antes para garantizar el acceso a los beneficios correspondientes.

10. Cancelar contratos y servicios

Como último paso entre los trámites esenciales tras el fallecimiento de un ser querido, está la cancelación o cambio de titularidad de contratos y servicios, como los suministros del hogar (luz, agua, teléfono, etc.). Para llevar a cabo estas gestiones, será necesario contar con el certificado de defunción del fallecido y su documento de identificación.

También podría interesarte:

Llámanos